El presidente no puede volar

Nueve de febrero de 2009. Tartagal (Salta) sufre un alud de barro que arrastra todo a su paso. Julio Cobos, vicepresidente de la Nación, en ejercicio de la Presidencia durante el viaje de Cristina a España, pide el avión presidencial para viajar al lugar y supervisar tareas de rescate. Alguien alerta a los Kirchner de tal pedido. El avión le es negado al propio Presidente y vuela a Salta con una comitiva de ministros, dejando a Cobos en Buenos Aires.


Ante tal humillación, cabe preguntarnos si los Kirchner (ya no podemos distinguir a uno del otro) son tan democráticos como se ufanan.

¿Quién dió la orden de que el avión no debía despegar llevando a bordo a Cobos? ¿Cristina, que en ese momento no estaba al mando del gobierno? ¿Néstor, que es un ciudadano raso?

¿Quién alertó a los Kirchner de que Cobos había pedido el uso del avión? ¿Un mando intermedio entre la Presidencia de la Nación y el piloto, desobedeciendo la autoridad constituída? ¿Harían lo mismo si Néstor o Cristina estuvieran en funciones?